Los Google Pixel supusieron un antes y un después en la estrategia de hardware de la empresa americana. La inversión de 1000 millones de dólares en HTC está directamente relacionada con la cada vez más fuerte apuesta de Google por fabricar su propio hardware. Y es que la estrategia de Apple de controlar hardware y software le ha funcionado muy bien a la compañía de la manzana.
Google compra HTC: el gran buscador da un paso importante en el hardware
HTC ha cedido a Google 2.000 ingenieros, además de acceso a su sistema productivo y a patentes. Todo esto afectará al mercado de la telefonía móvil de una manera que aún no podemos llegar a comprender, y es que Google cada vez más está apostando por controlar más partes del ecosistema Android.
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Con los últimos movimientos de Google en software ya hemos visto una creciente preocupación de la empresa por controlar el software de los millones de dispositivos que utilizan Android. En smartwatches, Chromebooks y coches con Android Auto la empresa tiene un control muy fuerte sobre lo que los fabricantes pueden hacer sobre el sistema, dejando muy poco margen de modificación. De esta manera se ha evitado más la fragmentación en estas plataformas. Esto mismo parece estar queriendo hacer en smartphones y tablets con el programa Android One en la gama media y Android Go en la gama baja.
Pero en la gama alta las cosas son muy diferentes, ya que es un mercado donde una buena presencia puede ser esencial para la compañía. Por este motivo el acuerdo con HTC tiene mucha importancia. Ahora Google podrá diseñar al milímetro los próximos Pixel, tanto en su aspecto exterior como en sus componentes internos, al estilo de lo que hace Apple.
¿Qué ventajas nos podría traer esto? Al controlar tantos apartados de la fabricación, podría lograr un mejor resultado en cámaras, con un postprocesado más avanzado. También mejoras en la batería y su optimización, o en la propia configuración del procesador. Aunque es pronto para especular sobre su diseño y especificaciones, podemos asegurar que los Pixel de 2018 serán un golpe en la mesa por parte de Google.
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