Los smartphones de procedencia china han llegado al mercado occidental para quedarse. Y no nos referimos a las clásicas marcas como Meizu, OnePlus o Xiaomi, sino a aquellas cuyo único país de distribución es el chino, sin contar las diversas webs de importación como Aliexpress o Gearbest. De un tiempo a esta parte, éstas han hecho las delicias de los usuarios, y todo apunta a que seguirá siendo así durante los próximos años. En consecuencia, resulta de forma obligada analizar las ventajas y desventajas de los smartphones chinos frente a las propuestas de las marcas tradicionales.
La Revista de Pro Android – Número 9 (diciembre 2017)
Si estabais pensando en adquirir un dispositivo procedente del país oriental, os recomendamos seguir leyendo para conocer todas las virtudes y defectos de los mismos.
¿Merecen la pena los smartphones chinos?
El mercado de los terminales chinos es cada vez más grande. Numerosas marcas aparecen en el país oriental cada año y lo hacen ofreciendo productos con una calidad cuanto menos destacable. Gracias a esto, podemos disfrutar de dispositivos realmente interesantes por precios que poco tienen que ver con los ofrecidos por las marcas tradicionales.
Asimismo, la puesta a punto en aspectos como el software, sumado al diseño y la calidad de fabricación de los mismos, hacen de éstos productos poco más que interesantes (si bien aspectos como el apartado fotográfico o la conectividad dejan mucho que desear). Lejos quedaron los tiempos donde la mayoría de smartphones chinos contaban con diseños deficientes y versiones de Android desfasadas, llegando a superar a día de hoy a las propuestas de las marcas tradicionales en las gamas media y de entrada.
Sin embargo, no todo el monte es orégano, y menos en el mundo de la tecnología. Y es que adquirir un teléfono chino actualmente supone asumir la ausencia de garantías en el país español, a no ser que el distribuidor en cuestión ofrezca un servicio post venta. Además, el número de defectos a largo plazo puede ser mayor que el de los terminales de fabricantes establecidos en Europa debido al menor control de calidad y a la ausencia de certificaciones de la Unión Europea. Añadir también que el soporte en lo referente al software una vez adquirido el teléfono suele ser nulo o escaso, a excepción de algunas marcas.
A pesar de ello, y bajo la opinión de un servidor, la compra de éstos resulta ideal para la mayoría de usuarios cuyos aspectos anteriores carezcan de importancia. Al fin y al cabo, se tratan de productos equilibrados y más que decentes, sobre todo si tenemos en cuenta el precio al que se encuentran.
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