Actualmente el catálogo de Sony cuenta con solo tres teléfonos (sin contar los del pasado año), que son el Sony Xperia 1 II, el Sony Xperia 10 II y el Sony Xperia L4, de mayor a menor categoría, respectivamente. Con tan solo tres terminales, la firma ha sido capaz de formar parte de todas las gamas del mercado, siendo más o menos interesantes según el modelo del que hablemos (os dejamos por aquí los precios que tendrán cuando sean puestos a la venta). Lo que no esperábamos es que el fabricante tuviese otro terminal preparado, el Sony S20A, que carece totalmente de sentido.
Los teléfonos rugerizados han conseguido hacerse un hueco en el mercado, especialmente diseñados para aquellos que quieran o necesiten un teléfono que aguante de todo y/o que tenga una batería descomunal. Históricamente, siempre han estado muy por detrás de los smartphones tradicionales, pero en los últimos años, han conseguido colocarse bastante a la par, pero este Sony S20A se ha quedado estancado en el año 2015 (y en algunos aspectos incluso en años anteriores).
Sony S20A: tamaño compacto, pantalla TFT y triple cámara
La verdad es que no sabemos por dónde coger a este Sony S20A. Por un lado, gracias a las fotografías aportadas por TENAA, podemos ver que estamos frente a un terminal rugerizado, con un grosor mayor al habitual y con un chasis que parece ser de goma. Podemos ver que en la parte superior cuenta con un botón extra además del de bloqueo y volumen, probablemente destinado a alguna función específica tipo Walkie-Talkie o un botón SOS. La pantalla no se aprecia bien, pero viendo otros detalles del terminal, es de esperar que tenga unos marcos considerables y formato 18:9. Nos sorprende en la parte trasera las tres cámaras del Sony S20A.
Hasta aquí acabaría lo que sería su diseño y empieza el despropósito. En primer lugar, en el interior de este Sony S20A encontramos… Android 6.0 Marshmallow. Como lo oyes, una versión de Android lanzada en 2015, pero agárrate fuerte, que no es lo peor que encontramos. Su pantalla es de tecnología TFT (probablemente la peor de todas), así que adiós a los ángulos de visión, además de tener una resolución de 960 x 480 píxeles (formato 18:9), que nos hace pensar en el año 2012 o incluso antes, cuando tener resolución HD en el móvil era un lujo. La diagonal de pantalla es de 5,45 pulgadas, pero pese a este tamaño, la altura del teléfono alcanza los 150,8 milímetros, casi la misma altura que el Samsung Galaxy S20.
En su interior, solo sabemos que contará con un procesador de ocho núcleos a 1.3 GHz, probablemente un MediaTek de la gama más baja posible, acompañado de 3, 4 o 6 GB de memoria RAM y un almacenamiento de 32, 64 o 128 GB. La verdad es que no sabemos en qué está pensando Sony, pues nos parece un teléfono totalmente fuera de lugar en pleno 2020 y por el que no pagaríamos ni 50 euros. Veremos finalmente a qué mercados está destinado este Sony S20A.
Vía| GSMArena
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