Energy Phone Max 4000: análisis y experiencia de uso

Jose Saiz

10 mayo, 2016

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El mercado de la gama baja en el mundo Android es un terreno pantanoso y complicado. Comprar un dispositivo de menos de 100 euros que no comprometa la experiencia usuario es una tarea laboriosa. Y dado el precio de estos dispositivos, es un terreno en el que las marcas no ponen especial atención. Algunas marcas que, precisamente, sí han apostado por la gama baja han sido Motorola y las españolas bq y Energy Sistem.


Energy Phone Max 4G: análisis


Energy Sistem ya presentó hace unos meses el Energy Phone Max 4G. Un dispositivo por menos de 140 euros que, sin temor a equivocarnos, supone la mejora alternativa actualmente en la gama de entrada. Un dispositivo que respeta la experiencia usuario por encima de todo y ofrece unas especificaciones-calidad-precio inmejorable.

Ahora, la marca española ha querido ajustar aún más el precio y lanzar al mercado un smartphone que no supere los 100 euros. Y lo ha conseguido. El Energy Phone Max 4000 es un nuevo familiar de la familia Max que se queda en unos escuetos 99 euros. Para llegar a este precio, la marca ha tenido que prescindir de algunos elementos clave, como puede ser la conectividad 4G. A cambio, para compensar ausencias así, lo ha justificado apostando por elementos más importantes para la mayoría de usuarios, como es la batería.

Diseño industrial

El diseño de este Energy Phone Max 4000 no es su fuerte: no es un terminal bonito, pero sí tiene un diseño eficiente. Hablamos de un terminal de 5 pulgadas, con unas dimensiones aceptables y un peso de poco más de 150 gramos. El terminal tiene un acabado gomoso muy agradecido —aunque atrapa todas las huellas— y el agarre con la mano la verdad que es realmente bueno. La marca española ha trabajado los materiales a pesar de tratarse de un dispositivo de menos de 100 euros, alejándose del tacto plasticoso de muchos terminales de este rango de precio.

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Además, Energy Sistem ha querido mantener los botones de navegación fuera de la pantalla, integrados dentro del chasis del dispositivo: algo que agradecemos y que, por supuesto, justifica los marcos del dispositivo. Si algo nos ha gustado de este Energy Phone Max 4000 es su construcción: muy bien ejecutado, bastante compacto, y a pesar de que se va a los 9 milímetros de grosor, la parte trasera con los bordes curvas hace que la ergonomía del terminal mejore sustancialmente. Los botones de volumen e inicio tienen un recorrido perfecto y, como era de esperar, son de plástico.

La pantalla es uno de los aciertos de este terminal. Nos encontramos con un panel IPS de 5 pulgadas con una acertada resolución HD, lo que supone una composición de 1280 x 720 pixeles. Es un buen panel —recordando que cuesta 100 euros—, con unos ángulos de visión muy acertados y un nivel de brillo máximo aceptable en condiciones donde la luz del sol no pegue excesivamente.

El sistema es movido por un procesador de cuatro núcleos, una GPU Mali-400 MP y 1 GB de memoria RAM. En el almacenamiento interno nos quedamos con unos escasos 8 GB de memoria, pero dispone de ranura microSD que permite hasta 128GB.

Conectividad 4G y cámara: sus principales carencias

Para ofrecer un terminal de este estilo, Energy Sistem ha tenido que apostar por algunos apartados y dejar otros de lado. El principal recorte lo vemos en la conectividad: la falta de 4G en este terminal es su ausencia más destaca. Sin embargo, es obvio que los usuarios que quieran apostar por un terminal de este rango de precio, buscan un smartphone para un uso rutinario y no intensivo, por lo que es una ausencia entendible que, hasta cierto punto, carece de importancia —para el usuario al que va dirigido este Energy Phone Max 4000—.

La cámara es otro de las especificaciones por las que se ha apostado recortar: nos encontramos con un sensor de 5 megapixeles que, si bien cumple a la perfección para un uso destinado a las redes sociales, no podemos pedirle más que para un uso esporádico.

Batería y experiencia de usuario

Si anteriormente destacábamos sus flaquezas, es hora de hablar de sus grandes fortalezas. Por que este Energy Phone Max 4000 las tiene. Por un lado, su nombre hace honor a la capacidad de batería que viene integrada en el dispositivo: 4000 miliamperios de capacidad dotan a este Energy Phone Max 4000. Una batería sumamente extraordinaria que ha conseguido hasta 4 días de batería sin necesidad de pasar por el cargador y con un uso normal basado en mensajería instantánea, redes sociales, llamadas y navegación web.

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Esta duración debemos darle gracias a que los 4000 mAh van en consonancia con una pantalla con resolución HD y un procesador moderado que sabe equilibrar el uso de la batería. Una autonomía que muchos usuarios —que barajan este rango de precio— buscan en un smartphone: un uso moderado, especificaciones modestas y la no necesidad de cargar el smartphone diariamente. Objetivo conseguido por parte de la marca española.

Pero la batería no es lo único bueno, ya que la experiencia de uso ha sido muy positiva. A un smartphone de 100 euros no le podemos pedir mucho, pero sí un rendimiento eficiente y con ausencia de lag. En los más de 10 días que hemos podido probarlos, el Energy Phone Max 4000 se ha comportado de manera ejemplar, la fluidez del sistema es muy positiva y aunque el procesador a veces demore en la apertura de aplicaciones, el rendimiento de las mismas y por la interfaz del sistema ha sido muy buenas. Nunca un dispositivo de 100 euros se había comportado tan bien.


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