El dispositivo que he estado utilizando durante las últimas semanas tiene pantalla táctil, cámara, botones, una entrada USB C, micrófonos y altavoces, pero no es un smartphone. Se trata de un traductor portátil de la marca Fluentalk. Concretamente es el Fluentalk T1 Mini, el último lanzamiento de una compañía especializada en este tipo de productos. ¿Su objetivo? Que te puedas comunicar de forma fluida en cualquier parte del mundo. Ya te adelanto que, si viajas mucho, y los idiomas no son tu fuerte, puede ser un buen compañero.
¿Qué hace exactamente un traductor portátil?
Me gustaría comenzar hablando del concepto de traductor portátil simultáneo, que es exactamente la categoría de este Fluentalk T1 Mini. Este dispositivo está pensado exclusivamente para comunicarte con una persona que hable un idioma diferente al tuyo. No es un smartphone, no hace llamadas y no permite instalar aplicaciones. ¡Simplemente traduce instantáneamente lo que dices!
Su interfaz, diseño y hardware están pensados para traducir de la forma más cómoda posible, por lo que utilizarlos es bastante sencillo. Un rápido vistazo al catálogo de Fluentalk permite comprobar que tiene muchos modelos con decenas de funciones. Si no quieres complicarte, el T1 Mini tiene todo lo básico, sin demasiadas florituras. Va directo al grano: traducción simultánea, traducción sin conexión, cámara y uso en todo el mundo.
En resumidas cuentas, cuando lo tienes configurado, simplemente tienes que seleccionar los idiomas de entrada y salida, pulsar el botón lateral y hablar. Acto seguido aparecerá tu traducción en la pantalla y también será reproducida por el altavoz ya traducida. Este sistema permite tener una conversación fluida con una persona que no habla ni una sola palabra de tu idioma.
Iniciando el Fluentalk T1 Mini
Cuando sacas el T1 Mini de la caja te encuentras con lo básico: el dispositivo, un cable de carga USB C, un colgante para llevarlo al cuello y un manual de instrucciones. Ponerlo en marcha no lleva más de 5 minutos. No tienes que registrarte en ningún sitio, no tienes que iniciar sesión… ¡nada! Basta con configurar tu idioma de preferencia, validar una red WiFi y hacer un par de clics más.
En esta configuración inicial ya se indica una de las características más interesantes de este producto. Me refiero a la conexión de datos mundial. Sí, cuenta con una tarjeta SIM en el interior que ofrece conexión de datos en todo el mundo, sin coste adicional y durante un año. Activarla es tan sencillo como encender el T1 Mini por primera vez. Me ha sorprendido que sea tan sencillo, pues no tienes que hacer nada.
3 o 4 minutos después de encenderlo por primera vez está configurado y listo para utilizarse en todo el mundo. Por supuesto, la interfaz muestra un pequeño tutorial de cómo utilizar las funciones, pero estas son tan sencillas e intuitivas que manejarlo con soltura no te costará nada.
¿Qué puedes hacer con el Fluentalk T1 Mini?
Dentro del catálogo de Fluentalk este modelo es uno de los más sencillos, pero más que suficiente bajo mi criterio. Tiene todo lo que puedo necesitar en un viaje al extranjero: traducción con y sin conexión, cámara para traducción de carteles y decenas de idiomas disponibles.
Su interfaz tiene 4 pantallas muy diferenciadas entre las que puedes navegar deslizando a un lado u otro. Son extremadamente sencillas de comprender y utilizar:
- Cámara: se abre una interfaz de fotografía en la que puedes capturar un cartel, un folleto o la carta de un restaurante. En la parte superior puedes seleccionar el idioma de entrada y salida. cuando haces la fotografía se escanea todo el texto que aparece en la imagen y se traduce.
- Traducción simultánea: es la interfaz principal y la que más vas a utilizar en tus viajes. En la parte superior debes seleccionar el idioma de entrada (azul) y el de salida (rojo). En la parte central se mostrará un historial con los mensajes que has traducido. Basta con pulsar el botón de la parte derecha y comenzar a hablar. El mensaje se indicará en la pantalla y también se reproducirá por los altavoces del Fluentalk T1 Mini.
- Traducción sin conexión: esta pantalla de la interfaz te permite descargar pares de idiomas para utilizarlos sin conexión. Elige uno, descárgalo y utilízalo en aquellos lugares donde la conexión de datos o WiFi sea inexistente. Puedes descargar hasta 4 pares de idiomas a la vez.
- Configuración: la cuarta parte de la interfaz muestra todo lo referente a la configuración del dispositivo. Puedes ver los días que te quedan del plan de datos, volver a ver el tutorial de uso, ver qué pares de idiomas tienes descargados, conocer cuánto almacenamiento tienes disponible y más.
- Menú rápido: te he contado que hay 4 pantallas en la interfaz, pero te he mentido. Existe una quinta zona de la interfaz que trabaja como menú rápido. Para entrar simplemente tienes que deslizar desde la parte superior. En este menú podrás activar/desactivar el WiFi, activar el modo avión, acceder a la configuración, modificar el brillo de la pantalla y modificar el tamaño de las letras de la interfaz. Funciona como una especie de centro de control.
Esto es todo lo que tiene un Fluentalk T1 Mini. No puedes instalar nada extra, por lo que la interfaz siempre se mantiene limpia, sencilla y organizada. Además, en el día a día no vas a tener que navegar con ella: basta con pulsar el botón de traducir y empezar a hablar.
¿Y cómo traduce?
Me encantaría saber chino, japonés y, por ejemplo, tailandés, para contarte cómo es la traducción que hace. Lamentablemente mis conocimientos sobre los idiomas asiáticos son nulos, por lo que he recurrido a la comparación. He utilizado los principales traductores online del mercado y me he puesto a comprar respuestas.
El resultado ha sido muy similar, por lo que puedo confirmar que las traducciones son decentes y que cuando hables con un tailandés no estarás maldiciendo a su familia en vez de preguntarle dónde comer el mejor Pad Thai de la ciudad.
Con el inglés me defiendo mejor, y aquí sí que he podido comprobar que las traducciones son útiles, están bien estructuradas y cuentan lo que dices. Además, todo sucede con bastante rapidez: pulsas el botón, hablas y al instante ya está traducido y comienza a reproducir la traducción hablada.
Esta es una de las principales ventajas de este traductor, no es necesario que la otra persona esté mirando la pantalla y leyendo qué le cuentas: el traductor dicta la conversación en ambos idiomas para que todo sea lo más fluido posible.
Por ejemplo, imagina que has configurado el T1 Mini para que traduzca de Español a Chino y viceversa. Cuando tú hablas en español se dicta en chino y cuando la otra persona te responde en chino se dicta en español.
Aún así, en la pantalla se muestra un historial para que puedas volver a leer lo que te han contado, por si te dan alguna indicación o recomendación y se te olvida. El sistema funciona a la perfección con WiFi, datos o los paquetes de idiomas descargados. Me veo utilizándolo con soltura cuando realice algún viaje a un país con idioma complicado.
Si te topas con carteles, folletos o cartas en otro idioma puedes traducirlas con la función de cámara. Te parecerá que esta tiene una calidad pésima, pero recuerda que no es para hacer fotos a paisajes, sino a textos. Los reconoce en segundos y la traducción se indica superpuesta sobre el otro idioma para poder seguir bien las palabras traducidas. No tengo mucho que hablar de la función de cámara: funciona bien y es verdaderamente útil para saber qué dicen los carteles de los comercios o en qué calle estás si te encuentras en Japón.
Compacto y muy funcional
Sabiendo que las funciones de traducción funcionan a la perfección es hora de entrar en materia de hardware. La compañía ha diseñado este aparato pensando en la comodidad de llevarlo durante todo el día a cuestas. Es muy compacto, tiene los botones justos y al ser de plástico parece bastante poco probable romperlo en caídas accidentales.
Tiene 4 botones: subir volumen, bajar volumen, traducir y bloqueo/apagado. Solo hay algo que no me ha gustado del diseño: el botón de bloqueo/apagado. Y no por su ubicación en la parte superior, sino por su sensibilidad. Es bastante sensible y basta con pasar el dedo por encima con una ligera presión par activarlo. No es algo malo, pero las primeras veces que lo utilices sabrás a lo que me refiero. En dos días te habrás acostumbrado y no recaerás en ello.
No lo he mencionado antes, pero el dispositivo no tiene patrón o PIN de bloqueo. Al no tener ninguna sesión iniciada no hay datos comprometedores. Esto es así para que puedas pulsar el botón de traducción y que esta comience de forma instantánea.
Hay dos micrófonos en el T1 Mini, los cuales, funcionan sorprendentemente bien. No es necesario hablar muy claro y despacio, puedes ir rápido y sabrá lo que estás diciendo en todo momento. Parece que han puesto buena parte del presupuesto en los micrófonos, pues son sensibles y recogen bien la información.
En el caso de la salida de audio solo tenemos un altavoz, pero no es problema. Este tiene un buen volumen y no creo que se quede corto. Si estás en un mercado de especias de Delhi quizá tienes que pegártelo un poco a la oreja, pero en general escucharás traducciones claras y a buen volumen.
La resolución de la pantalla me parece algo irrelevante en este tipo de dispositivos, pero puedo contarte que es HD y mide 2,8 pulgadas. No te asustes, a pesar de tener una pantalla táctil, esta función la utilizarás poco. La mayor parte de la interacción con este dispositivo se hace con la voz, por lo que su pantalla pequeña no es un inconveniente. Más bien una ventaja que lo hace más compacto. Y de su tactilidad no hay mucho que destacar, funciona bien, como puedes esperar.
Un buen compañero de viaje
Tras varios días probándolo puedo decir que me lo llevará, sin dudarlo, al próximo viaje que realice. Tiene especial uso en países asiáticos o africanos, donde el inglés no siempre está presente si te alejas de las capitales. Funciona tal y como puedes esperar, no me ha fallado ni una sola vez y llevarlo encima no es ninguna molestia.
Este Fluentalk T1 Mini es una herramienta para sacarle más partido a tus viajes. Es intuitivo y rápido, por lo que no te dará pereza sacarlo rápidamente para preguntar a alguien por un lugar donde comer o buscar a alguien que hable tu idioma en el hotel.
Su precio es 149 euros/dólares en la propia página de Fluentalk. Puede que sea un precio algo alto para utilizarlo en un viaje puntual, pero si el turismo es lo tuyo y quieres sacarlo el máximo partido a tus viajes me parece un muy buen compañero de viaje. Además, en este precio está incluido el plan de datos mundial durante un año. Si viajas sabes lo que cuesta tener conexión en países de Asia o África, por lo que debes tenerlo en cuenta.
Si te ha picado la curiosidad, antes de comprarlo te recomiendo echar un vistazo a la web de Fluentalk, pues tienen auriculares traductores, audífonos de traducción simultánea y productos relacionados con la traducción de lo más interesante.
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