La semana pasada pudimos analizar las primeras reacciones de Google después de la histórica multa impuesta por la Comisión Europea. La compañía de la gran G tendrá que pagar un total de 4.340 millones de euros, una suma alta incluso para Google a partir de la cual ha decidido tomar medidas. A partir de ahora, Google ha decidido imponer una tarifa que tendrán que pagar todos los fabricantes para poder incorporar las aplicaciones de la compañía. El periodo de las apps preinstaladas de Google ha llegado a su fin y las marcas tendrán que dejarse el dinero si quieren incluir estas herramientas en sus nuevos modelos. Hoy se han desvelado los posibles precios de las tarifas.
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Google obligará a pagar distintas tarifas a los fabricantes que variarán según el dispositivo
The Verge ha sido el medio que ha desvelado los últimos detalles de las nuevas licencias con las que Google quiere cobrar a los fabricantes por incluir sus apps en los nuevos dispositivos. Unos datos provenientes de un informe confidencial en el que la tarifa máxima se sitúa en los 40 dólares. Cabe destacar que las cifras varían dependiendo de las características del dispositivo, concretamente, de la densidad de los píxeles por pantalla. También existen países como Suecia, Reino Unido o Alemania que incluyen una tarifa más alta.
Los terminales con una densidad superior a los 500 píxeles (Galaxy Note 9, Galaxy S9…) tendrían que pagar la cuota más alta de 40 dólares. Sin embargo, los smartphones que incorporan una densidad de entre 400 y 500 ppi en sus pantallas tendrán que realizar un pago de 20 dólares si quieres disfrutar de las aplicaciones de Google. Si los dispositivos no llegan a los 400 ppi, solo habrá que pagar un máximo de 10 dólares pudiendo verse reducido hasta los 2,5 dólares en algunos dispositivos de gama baja. Y es que según las nuevas informaciones, estas medidas entrarían en circulación a partir del próximo 29 de octubre pero no pasarían a ser efectivas hasta el 1 de febrero de 2019.
¿A qué viene este sistema? El procedimiento es muy sencillo. Normalmente, cuanta mayor densidad tienen los píxeles mejor es la calidad del teléfono y mayor es su precio. Google ha decidido utilizar esta técnica para introducir ese baremo con el que poder seleccionar cada móvil por su calidad y precio. Por lo tanto, los terminales con mas ppi pagarán mayores tasas que los dispositivos con una menor calidad en su pantalla.
Acuerdos económicos para favorecer a las marcas
Es importante señalar que la decisión de la Comisión Europea no obliga a Google a cobrar a sus fabricantes, sino que exige que se rompa el acuerdo en el que se instalas sus aplicaciones de forma obligatoria en los terminales. Ha sido la compañía de la gran G la que ha optado por aplicar estas tarifas para todos aquellos fabricantes que quieran utilizar sus herramientas. Pero no todo son malas noticias, Google ha decidido crear acuerdos con los que poder cubrir una parte de los costes de cada licencia para evitar la desbandada de las grandes marcas. Un entendimiento que solo sería posible si el fabricante añade las apps de Google Chrome y el popular buscador en sus dispositivos.
Por el momento, Google no ha querido pronunciarse ante una situación que parece sobrepasar a la compañía. Una multa de más de 4.000 millones de euros no es una cosa que se recupere en dos días y la hora de tomar decisiones ha llegado. Las informaciones sugeridas por The Verge dan a conocer un nuevo sistema con el que la compañía de la gran G quiere experimentar una recuperación económica para reestablecer la normalidad. Lo que no sabemos es si a partir de este momento surgirán otras empresas que puedan suministrar unas aplicaciones similares a las de Google.
Un futuro incierto
Hasta ahora, las aplicaciones de Google han sido cruciales en todos y cada uno de los dispositivos Android. Los beneficios de la compañía californiana se cuentan en miles de millones. Sin embargo, la llegada de la Comisión Europea puede mermar ampliamente a una de las empresas más potentes del mundo. al menos en el sector de la telefonía. Los fabricantes son los que tienen ahora la pelota en un tejado al que es muy complicado acceder, ya que los usuarios exigirán la incorporación de las aplicaciones de Google para comprar los distintos terminales. Eso sí, lo que no sabemos es si esta decisión generará una subida importante en los precios de los nuevos smartphones que encarezca aún más el mercado.
Por el momento, nada más se sabe sobre una noticia que ha conseguido sobresaltar a los usuarios de medio mundo. Esperemos que Google se explique claramente y muestre cual va ser el modo de proceder en esta compleja situación.
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Fuente / The Verge
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