El Samsung Galaxy S8 Active pasa por Geekbench revelando su rendimiento

Eduard Esteller

13 junio, 2017

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Hace varias semanas que no hablamos del Samsung Galaxy S8 Active. Se trata de la versión robusta del Galaxy S8, un modelo que llevamos varios años viendo en el mercado. Este año la cosa cambia, ya que el mercado de terminales robustos ha dado un paso importante, viendo nuevas compañías, y muchos nuevos móviles resistentes a todo. Samsung tiene que dar un golpe en la mesa, aunque no será demasiado complicado conociendo las características del dispositivo. Hoy vemos como pasa por Geekbench, revelando datos sobre su rendimiento, además del procesador, un componente clave para conocer la disponibilidad del terminal.


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Año tras año hemos visto como Samsung lanzaba una versión robusta de su buque insignia. Posiblemente este año sea uno de los más complicados, ya que no hay una versión plana, y las pantallas curvas no se llevan demasiado bien con las caídas. Samsung ha tenido que modificar el diseño de la pantalla para poder lanzar su versión Active, algo que no hemos visto hasta ahora en la gama.

El Samsung Galaxy S8 Active contará con el Snapdragon 835

Llevábamos varias semanas sin noticias sobre este dispositivo, lo que nos dejaba algo desanimados por no conocer una fecha de presentación. Ahora tampoco podemos conocer dicha fecha, pero tenemos datos sobre el rendimiento del dispositivo, así como de la versión de Android que correrá y su procesador.

Gracias a Geekbench podemos saber que el procesador elegido es el Snapdragon 835, lo que dificulta su llegada a nuestro mercado, ya que es un chip elegido por Samsung exclusivamente para el mercado en Estados Unidos. Aún así, no descartamos que Samsung lo lance en algún mercado de Europa tras el auge de este tipo de terminales.

En la prueba de Geekbench podemos ver como las puntuaciones no son tan altas como las del Galaxy S8, sobre todo en las pruebas de un solo núcleo, donde la versión Active consigue 1842 puntos. Cuando todos los núcleos se ponen a funcionar consigue 6394 puntos, que sigue siendo menos que el Galaxy S8 original. 

No sabemos el motivo de esta bajada de rendimiento, aunque se trata de una prueba aislada que puede cambiar cuando el dispositivo salga al mercado. Por último, saber que el hardware interno será el mismo, y la versión de Android que corre es la 7.0, aunque se espera que salga al mercado con Android 7.1.1 Nougat. 


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 Fuente | Geekbench

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