Quién lo iba a decir. Según un informe realizado por The Wall Street Journal, Samsung, el gigante asiático capaz de fagocitar el mercado de dispositivos con Android a nivel mundial, parece estar mostrando signos de flaqueza.
Dicho informe apunta a un descenso de las ventas de uno de sus buques insignia: el Samsung Galaxy S5. Y es que, a pesar de haber logrado vender 12 millones de unidades en sus primeros tres meses de vida, las –a priori– envidiables cifras cosechadas por el smartphone que vio la luz durante el pasado Mobile World Congress, han supuesto 4 millones menos de las que logró su predecesor; esto se traduce en un descenso de alrededor del 40 por ciento respecto a las estimaciones de la propia firma surcoreana. Casi nada.
Mientras que Estados Unidos se ha consolidado como el mercado más importante para Samsung -de hecho, es el único gran mercado en el que las ventas de dispositivos de la familia Galaxy continúan aumentando curso tras curso-, el gran varapalo ha llegado desde China, donde las ventas han disminuido nada menos que un 50 por ciento.
Sustentándose en la caída de ingresos y beneficios que condujo a la promesa de Samsung de reformar de su portfolio de smartphones, The Wall Street Journal desveló que, según fuentes cercanas a la compañía, ésta estaría considerando realizar algunos cambios a nivel ejecutivo. Si bien es cierto que no dejan de ser meros rumores y, por lo tanto, debemos ser cautelosos, se especulaba incluso con el cese de JK Shin como CEO.
Sea como fuere, es innegable que la competencia es feroz y está dificultando enormemente las cosas, por lo que Samsung debe tomar cartas en el asunto y concentrar todos sus esfuerzos para asegurar el futuro de sus distintas familias de productos, en general, y de los smartphones con Android, en particular.
¿Qué opináis?, ¿pensáis que Samsung ha caído en la autocomplacencia?
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