30 septiembre, 2025
Samsung Display ha dejado entrever que acelerará la preparación para la producción en masa de paneles OLED plegables destinados a un «cliente norteamericano». Aunque no se han mencionado nombres, todas las pistas apuntan a Apple y al largamente rumoreado iPhone Fold. El movimiento encaja con los plazos que barajan los analistas para 2026 y supone un espaldarazo a un formato en el que Android lleva ventaja desde hace años. Para el usuario, lo relevante es que la competencia en la gama alta se intensifica y que podríamos ver pantallas con un pliegue menos perceptible y mayor eficiencia.
Las declaraciones llegan desde la cúpula de Samsung Display, que también confirmó que su línea OLED de 8.ª generación (8.6G) iniciará operaciones el próximo año. Eso se traduce en más capacidad y menores costes por panel, justo a tiempo para un posible lanzamiento del iPhone plegable en la segunda mitad de 2026, previsiblemente junto a la familia iPhone 18. Aunque Apple no ha oficializado nada, el hecho de que Samsung —su proveedor principal de pantallas para iPhone— hable abiertamente de un encargo plegable para un cliente «de Norteamérica» reduce la incógnita a la mínima expresión.
El presidente de Samsung Display comentó a la prensa en Seúl que la compañía está preparando la producción en masa de paneles OLED para móviles plegables y que esos paneles se suministrarán a un cliente norteamericano. Además, apuntó que su línea 8,6G (con sustratos de mayor tamaño) estará operativa entre finales del segundo y el tercer trimestre del próximo año, un calendario que encaja con los ciclos de lanzamiento del iPhone en otoño.
¿Por qué se interpreta como una confirmación en clave Apple? Primero, porque Samsung Display es el socio clave de Apple para los paneles del iPhone, especialmente en los modelos más avanzados. Segundo, porque la mención a un cliente norteamericano con lanzamientos anuales encaja con Cupertino. Y tercero, porque en los últimos meses han circulado informes sobre prototipos funcionales y de iOS 27 con funciones pensadas para pantallas plegables, indicio de que el ecosistema se está preparando para ese salto.
Si nada se tuerce, el iPhone Fold aparecería en 2026 y podría compartir escaparate con los iPhone 18. En lo técnico, las fuentes más reputadas hablan de un formato de libro con pliegue interior y un fuerte foco en eliminar —o minimizar— la marca del pliegue. Aquí el músculo de Samsung Display, con su nueva línea 8,6G y mejoras en materiales y apilado OLED, será clave para alcanzar la durabilidad y la calidad de imagen que Apple suele exigir.
Sobre especificaciones, por ahora solo hay pistas no oficiales: integración para eliminar capas intermedias o para simplificar la estructura del panel, un nuevo chip de la serie A optimizado para tareas de IA y conectividad con un módem C2 de segunda generación. También se ha barajado la desaparición de la bandeja SIM física en favor de la eSIM, siguiendo la tendencia de los últimos iPhone vendidos en algunos mercados. Conviene tomar todo esto con cautela: no hay ficha técnica cerrada y Apple podría ajustar el proyecto hasta el último minuto.
Si se confirma, la entrada de Apple en los móviles plegables validará el formato ante el gran público y elevará el nivel de exigencia. Para el usuario Android, la consecuencia positiva es obvia: más innovación y mejores pantallas en los próximos Galaxy Z, los Pixel Fold y compañía. Para Samsung, el movimiento es doble: como líder de ventas en móviles plegables y, a la vez, como proveedor de paneles. Si el encargo de Apple se concreta, Samsung Display ganará volumen y podrían reducirse costes, beneficiando a otros fabricantes que también compran sus pantallas.
No menos importante es el salto a la 8,6.ª generación: al trabajar con sustratos más grandes, Samsung Display puede mejorar el rendimiento de fabricación y, con ello, la consistencia del panel (menos defectos, mejor uniformidad) y el precio por unidad. Ese avance, sumado a nuevas capas para mejorar la legibilidad y evitar reflejos, debería traducirse en paneles más brillantes, eficientes y con el pliegue menos visible.
Aunque todo apunta a Apple, todavía no hay anuncio oficial. Desconocemos diagonales exactas, volúmenes de producción e incluso si Samsung será proveedor en exclusiva o compartirá pedidos con LG Display u otros actores. Informes previos han hablado de capacidades anuales de producción dedicadas y de cifras iniciales que oscilan entre 6 y 8 millones de unidades, pero son estimaciones sujetas a cambios en función del rendimiento y la demanda.
Para el lector, lo más útil es quedarse con la idea fuerza: 2026 pinta como el año del iPhone plegable, y eso presionará a todo el mercado para ofrecer mejores paneles, bisagras más fiables y software más adaptado. Si Android quiere mantener su ventaja en experiencia plegable, tendrá que redoblar esfuerzos en peso, grosor, resistencia del pliegue y precio.
Si el iPhone Fold llega en 2026 con una pantalla a la altura, el beneficiado final será el usuario, tanto en iOS como en Android. Más opciones, mejor calidad de panel y una competencia que empuja hacia móviles plegables más finos, duraderos y económicos.
Todavía queda mucho por conocer sobre el primer plegable de Apple, pero lo cierto es que el fabricante se está preparando para mover los yacimientos del mercado móvil. Por otro lado, algunos rumores aseguran que los de Cupertino también están trabajando en un iPad plegable, y en este punto todo es posible.
¿Crees que Apple llegará a tiempo para revolucionar los plegables o Android seguirá manteniendo la delantera en experiencia y precio?
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